Las Vegas obtiene el 90% de su agua del lago Mead, el mayor embalse de Estados Unidos. Sin embargo, los alrededores extraen más agua del lago que del deshielo y el agua de lluvia que fluye desde las Montañas Rocosas. Durante los 14 años de sequía, el nivel del agua descendió 35 metros. Por ello, las dos tomas de agua existentes para el valle de Las Vegas corren peligro de secarse.
La construcción del nuevo punto de toma de agua, más profundo, Toma nº 3, es una carrera contrarreloj. Una sección crucial se completará el 10 de diciembre de 2014: La tuneladora Herrenknecht S-502 (Ø 7,2 metros) llega a su destino en el fondo del lago después de tres años de trabajos de perforación. Partiendo de un pozo de 180 metros de profundidad, ha excavado un túnel de 4,4 kilómetros de longitud bajo el lago. La máquina fue sometida a una presión de agua de hasta 15 bares, un nuevo récord mundial. El récord anterior, de 11 bares, lo alcanzó la tuneladora multimodo de Herrenknecht para el proyecto del túnel de Hallandsås, en Suecia, que se terminó en 2013.
La máquina diseñada para el lago Mead es también una tuneladora multimodal: puede funcionar en modo abierto o cerrado en función de las condiciones del terreno y cuenta con una serie de equipos adicionales. La S-502 está diseñada de forma óptima para las condiciones extremas del proyecto y empezó a funcionar desde un pozo de 180 metros de profundidad en la orilla del lago a finales de 2011. Durante meses, se abre paso a través de rocas fracturadas y arcillas entremezcladas con inclusiones de agua marina. Puede soportar presiones de hasta 15 bares, una novedad absoluta en la excavación mecanizada de túneles.
La tuneladora se abre paso a través de formaciones geológicas abrasivas, lo que requiere paradas repetidas para sustituir diversas piezas de desgaste. En cuanto la máquina alcanza un terreno bueno y estable, el personal de la obra pasa del modo de funcionamiento cerrado con apoyo de fluidos al modo abierto de roca dura. En este modo, la máquina multimodo se abre paso brevemente a través de la roca a velocidades de cuatro a cinco centímetros por minuto y hasta más de cien metros por semana.
Está previsto que las obras de la toma nº 3 concluyan en verano de 2015. El nuevo túnel de extracción conducirá el agua del lago a través de la toma nº 2 hasta una planta de tratamiento de agua potable, desde donde se canalizará a hogares y empresas.
