En Glasgow, Escocia, llueve de media más de 200 días al año, con un total de unos 1.100 mm de precipitaciones. Berlín sólo tiene una media de 115 días de lluvia y Sevilla, en España, sólo 65. Para evitar inundaciones y mejorar la calidad del agua en la región, el sistema de aguas residuales de Glasgow se amplía continuamente, por ejemplo con el túnel de Shieldhall, el túnel de aguas residuales más grande de Escocia.

Un mixshield de Herrenknecht está excavando un túnel en el sur de la ciudad, desde Craigton hasta Queen Park, durante un periodo de 15 meses para la tubería de aguas residuales de casi 5 kilómetros de longitud. La tunelación comenzó en julio de 2016, con la colocación de más de 3200 anillos de segmento para revestir el túnel antes de que la tuneladora de algo menos de 5,5 metros de diámetro completara su misión en octubre de 2017. Durante la excavación, con una sobrecarga mínima de tan solo 4 metros, se pasarán con éxito líneas ferroviarias sensibles y antiguas minas de carbón.

El nuevo túnel de Shieldhall ofrece 90.000 metros cúbicos adicionales de capacidad para aguas pluviales y residuales. Se retirarán más de 500.000 toneladas de material para la moderna infraestructura.