
En el condado de King, al norte de Seattle (Washington), se está modernizando el sistema de evacuación de aguas residuales. Se van a perforar túneles de 20 kilómetros de longitud para recoger las aguas residuales y conducirlas a la planta de tratamiento. Las elevadas presiones previstas en las aguas subterráneas y el riesgo de encontrar gas metano definen algunos de los retos del proyecto.
Dos máquinas Mixschild están excavando un total de casi diez kilómetros de túnel para aguas residuales. Ambas parten del mismo pozo, el North Kenmore Portal, cuyas dimensiones plantearon verdaderos retos para la logística de la instalación. Las piezas de las máquinas de reserva permanecen en el borde superior del pozo de lanzamiento y sólo se conectan cuando los segmentos delanteros de las máquinas han avanzado lo suficiente en sus túneles. En octubre de 2007, la primera máquina S-379 inicia su avance a través de 3.530 metros de roca, seguida de su hermana S-380 en marzo de 2008, que tiene que recorrer una distancia de 6.200 metros. Ambas máquinas completarán el recorrido en 2010.